Una beba que fue robada esta mañana del hospital Alende del partido bonaerense de Lomas de Zamora apareció esta tarde de miércoles y fue restituida a su madre en el centro de salud, mientras que una mujer fue detenida por el hecho en la localidad de Luis Guillón cuando estaba a punto de tomar un micro, indicaron fuentes allegadas a la investigación.
Un tío de la niña, Daniel, afirmó a Télam que «la beba ya está con la mamá» y María, abuela paterna de la beba, explicó que «la están revisando» y luego ingresó al establecimiento junto a las autoridades de la institución para poder ver a su nieta, a quien no había conocido aún.
La prima de la mamá contó cómo encontraron a la beba: «Una chica que trabaja en una estación de servicio en Luis Guillón vio a una mujer nerviosa con una bebé recién nacida que fue a comprar leche, y entonces llamó a la policía para que la retengan».
«Al lado de la estación salen los micros de larga distancia y la mujer dijo que iba a viajar. La chica que trabaja en la estación de servicio hizo capturas de las cámaras y mandó las fotos. Nosotros decíamos que era igual a la bebé, y parece que sí«, sostuvo ante la euforia de familiares, amigos y compañeros de trabajo de la madre que se concentraron en el lugar para reclamar la aparición de la niña y respuestas por parte de las autoridades de la institución.
Efectivos de infantería, que se encontraban presentes en la puerta del hospital luego de algunos disturbios, se retiraron una vez que se comunicó a los familiares que la beba había sido hallada en el partido bonaerense de Esteban Echeverría, y fue ingresada por una entrada lateral del centro de salud, por calle Azamor.
Fuentes de la investigación sostuvieron a Télam que la mujer detenida dijo que «ella venía de la costa, de Mar del Tuyú y que la bebé nació el 30 de noviembre», pero no tenía ningún tipo papeles de la menor.
Los detalles y la búsqueda
Según fuentes policiales, la sustracción de la beba ocurrió a las 9:30 cuando «una mujer, simulando ser enfermera/médica» del hospital Alende, ubicado en Claudio de Alas al 2500 de la localidad de Ingeniero Budge, ingresó a la habitación 107 e informó a la madre, Nicole Sandoval, que debía llevar a la niña a realizar controles pero no regresó.
Sandoval, de 27 años, vive en el barrio Tongui, en Budge (Lomas de Zamora), es madre de un niño de cinco años, y esta es su primera hija con su pareja David, con quien se comunicó telefónicamente esta mañana y le dijo «llorando» que se habían llevado a la nena, señaló el hombre, quien en la puerta del lugar denunció la poca seguridad que había en el hospital en el que, dijo, «entra cualquiera».
«Me fui a casa a traerles cosas a mi mujer y mi hija y a las nueve me llama desesperada, llorando para contarme lo que había pasado», señaló David. «Estamos buscando por nuestra cuenta porque nadie hace nada, ni nos da una respuesta», se quejó el hombre.
El padre de la beba sostuvo que no tuvieron ninguna explicación por parte de las autoridades del hospital más que el fuerte operativo policial que se montó en las puertas del lugar.
Cerca de las 13, según los familiares, se le tomó declaración testimonial a Sandoval, quien aún se encuentra dentro del hospital ya que ni ella ni la bebé, a quien llamaron Ailyn Isabella, tenían el alta.
Luisa, abuela materna de la beba, aseguró que su hija le relató que «una mujer con un ambo gris entró a la habitación, le dijo que era la enfermera, le pidió la libreta» de su nieta y le dijo que «se la tenía que llevar a hacer controles» y que, siempre según el relato de Nicole, «esta señora le dijo a otros que era de limpieza».
Al rato, al ver que la supuesta enfermera no regresaba con su hija, la joven madre empezó a llamar a otras enfermeras y se comunicó de inmediato con su pareja y con su madre.
«¿Cómo puede ser que no haya seguridad? Esta mujer se llevó a mi nieta que tiene menos de 24 horas de vida, se la llevó sin el alta, no le pidieron ni preguntaron nada», cuestionó la mujer en las puertas del hospital.
En el hecho interviene la fiscalía 4 de Lomas de Zamora, a cargo del fiscal Leonardo Kaszewski, quien impartió órdenes de tomar nuevas declaraciones testimoniales y directivas para reconstruir el recorrido que hizo la mujer una vez que salió del hospital.
El fiscal dijo a Télam que no pidieron un ADN porque «la madre reconoció a la beba y la imputada tenía la libreta sanitaria con la huella del pie que le tomaron cuando nació y haremos el cotejo. Además aún tenía el cordón umbilical y los médicos la reconocieron”.
Y remarcó que se obtuvieron distintas muestras que de ser necesarias se usarían para corroborar la información genética, pero “la familia la reconoció y entiendo que no la necesita”.
Fuentes vinculadas a la investigación informaron a Télam que «se descartó el primer video en el cual se veía a una señora con un bebé» cuando salía del hospital y agregaron que se trata de «una mujer que se acercó para que le realicen un control a su bebé».
Se trata de imágenes que mostraban a una mujer de 1,55 metros de altura aproximadamente y pelo negro enrulado que llevaba a un bebé envuelto en una manta de color claro.
Las fuentes señalaron que las cámaras internas del hospital fueron chequeadas por la fiscalía y que «se logró ver a una señora que estaba con un ambo de enfermera, barbijo y un bulto en la zona del abdomen».
En tanto, los voceros precisaron a Télam que se constató que a la bebé le cambiaron la ropa dentro del hospital, ya que la descartaron en un cesto de basura en la institución, y que la mujer que se la llevó estuvo desde temprano en el centro de salud y que, al principio, aseguró que era personal de limpieza.
Asimismo, en el marco de la investigación se tomaron declaraciones a los posibles testigos y se recopiló información de las cámaras de seguridad.
Poco antes de las 13, los familiares de Ailyn intentaron ingresar al hospital porque nadie los atendía y rompieron algunos vidrios de la entrada, pero los efectivos de la policía que custodiaban el hospital intervinieron para frenar los incidentes, durante los cuales la abuela paterna de la bebé se desmayó y debió ser asistida.